No cabe duda que son los maestros de la mercadotecnia y el MKT, y Gene así la vuleve a meter…la venta
Lo dijo DIO una vez, “Gene Simmons lo patenta y si lo mencionas te lo cobra”, y si Ronnie lo dice es porque se trata de algo veras. Lo concreto es que en los últimos días se realizó una de las mayores ventas que la banda haya hecho de su marca, y es nada menos que la venta del catálogo de KISS, pero, ¿Qué significa esto?
La venta además incluye a sus personajes y maquillaje a Pophouse, la compañía sueca que ideó el show holográfico de ABBA. Todo por más de $300 millones de dólares, monto más que jugoso para el Midas del rock. Así es como KISS se desprende de todos los derechos musicales y de imagen que la banda, incluidos los masters de sus grabaciones y derechos de publicación, así como los maquillajes de «Demon» de Gene Simmons y «Starchild» de Paul Stanley.
Pero ojo, que aquí viene la trampa. No se trata de una venta real como se difundió (otro aletazo marketero al mentón de Gene), sino más bien, se trata de una estrategia de “colaboración” con la compañía. En ese sentido, la venta del catálogo y su imagen es con intención de “exponer” a Kiss a las generaciones más jóvenes, según ha explicado el director general de Pophouse, Per Sundin.
“Se trata exactamente de una colaboración. Sería negligente en nuestro deber fiduciario inferido abandonar lo que creamos. La gente podría malinterpretarlo y pensar: ‘Está bien, ahora Pophouse está haciendo esas cosas y nosotros estamos en Beverly Hills de brazos cruzados’. Palabras del turco de Simmons, quien hace desde hoy publicidad para el retorno de KISS como avatares en una serie de conciertos hechos con hologramas, en 2027, para recaudar millones de dólares.