El día de su 60 cumpleaños Ronnie Wood, guitarrista de los incombustibles «Rolling Stones», se despertó para encontrarse con un sorprendente regalo, de parte de su mujer Jo e hijos, aparcado en el jardín de su mansión en el sur de Inglaterra. Una bonita y tradicional caravana de gitanos era el regalo, avaluada en más 40.000 libras esterlinas, provocó en el guitarrista una explosión de risa y júbilo. Parece ser que a Ronnie el regalo le encantó ya que desde pequeño siempre quiso tener una caravana de estas características. El viejo rockero, que tiene raices gitanas romanis y pasó parte de su infancia en remolques, incluso bromeó diciendo que se iría de gira con ella.